Sensei: Vamos, no hay porque ponerse así, talvez no era el momento más adecuado para hacerlo, ¿o si?
Daniel: ...
Lic: ¿Que pasó? como salió la cita con Ale? *Sensei y Daniel callan* Vamos cuentenme ya, me están asustando.
Daniel: No hay mucho que contar
Sensei: Es que creo que la regó
Lic: ¿Quien?
Sensei: Pues... yo, o talvez Daniel, para el caso es igual, las cosas no salieron como se pensaba.
Lic: Ya veo... era de esperarse. ¿Cómo se les ocurre ir sin llevarme? ¿Que me dicen ahora? ¿siguen pensando que no hago falta? ¿Que con la imagen sencilla y tierna de ustedes dos va a ser suficiente para recuperarla? No son más que unos ingenuos estúpidos
Sensei: ¿Como te atreves a llamarme asi? Yo...
Daniel: ¡Ya! *levanta la mano* No estoy de humor para sus pleitos. Lic, si no te llevé fue porque tu presencia intimida y llega a asustar a la gente. Quizás seamos unos ingenuos el Sensei y yo, pero prefiero eso a lastimar a alguien como Ale.
Lic: ... *aprieta los dientes y no sabe que decir*
Sensei: ¿Sabes una cosa? creo que en parte el Lic tiene razón. Lo de hoy es prueba de que las cosas no están funcionando y que, quizás, sería mejor que cambies tu estrategia con ella, ¿no crees Daniel?
Daniel: Supongo que tienes razón *agacha la mirada* los últimos días no he hecho más que anhelar estar con ella y pensar mil formas de acercarme. He repasado mentalmente varias conversaciones y estudiado diferentes temas para los momentos difíciles cuando nos quedamos callados. Incluso he intentado ponerme en su lugar y hasta he pedido consejos a varios amigos acerca de como ser alguien que le importe y que piense en mí con la misma intensidad que yo pienso en ella. *levanta la mirada con los ojos llorosos* Pero algo sucede justo cuando estoy con ella que me paraliza. Todo lo que tenía en mente de pronto se borra y mis oportunidades las veo desvanecerse con cada comentario y con cada broma que no resulta. Y cuando la tomo de la mano, y cuando se recarga en mi hombro, y lo que pasó hoy... Ya no sé ni que pensar.
Sensei: ... *confundido mira hacia el Lic*
Lic: ¡Maldición! Si no se trata de una tontería que haya hecho el sensei entonces diganme que pasó. ¿Acaso ella les hizo algo? ¿Que tiene de extraordinario esa chica para comportarse de esa forma con ustedes? ¿Con nosotros? ¡Diganme de una vez!
Sensei: La besé
Daniel: No, no fuiste tú. Quizas haya parecido así pero no, en realidad fui yo quien lo hizo.
Lic: ¿Y? ¿que pasó después?
Daniel: Nada
Lic: ¿Cómo que nada?
Sensei: Si, así como lo oyes, nada. Y es por eso que Daniel está así.
*los tres callan por un momento*
Daniel: Se suponia que iriamos al cine pero cuando llegó al lugar de encuentro me dijo que debíamos regresar temprano porque había sido invitada a una fiesta. Cumpleaños de su maestra o algo así, según me dijo. Así que traté de poner buena cara y de no amargarme por eso, aunque debí saber en ese momento que las cosas comenzaban a salir mal.
Lic: ¿Y despues?, ¿a donde fueron entonces?
Daniel: La llevé a comer. Yo no tenia mucha hambre pero con tal de ir a algún lado con ella tuve que pedir algo. A ella le gustó mucho la comida.
Sensei: Y sabía usar los palillos chinos muy bien.
Daniel: Estuvimos un rato ahi pero después comenzó a platicarme acerca de un par de amigos suyos. Uno de ellos, según me contó, quiere andar con ella. Y bueno, ya te imaginarás como me puse.
Lic: Yo en tu lugar la habria mandado al demonio. ¿¿Que tiene en la cabeza?? ¿Que no se da cuenta que eso nos lastima? Es una despiadada al hacerte eso Daniel, y tú un tonto por permitirselo.
Daniel: Pero ahi no terminó. Saliendo del restaurante fuimos a la libreria y ella, bueno... Ambos, comenzamos a acercarnos más y hubo ciertos roses que no necesitaron un tema de conversación. Sensei: Esa fue la mejor parte porque las cosas marchaban como lo habíamos pensado.
Lic: Ok, ok, ok, esa parte no me interesa, vamos al grano. ¿Porque vienen con esa cara de derrotados?
Daniel: Bueno, es que, después ví que ya era un poco tarde y la llevé a casa en metro. Aproveché que había un vendedor de flores y le compré una rosa blanca.
Sensei: Si, pero creo que no le gustó.
Daniel: Estaba por mencionar eso, gracias Sensei *sarcastico*
Lic: ¿Y luego?
Daniel: Pues en el metro estabamos todavía mas cerca y yo la abracé y ella estaba tan cerca que quise que ese momento no terminara nunca. Sentir de nuevo su respiración tan cerca de la mia y su voz susurrandome al oído. Fue un momento que no debí desaprovechar
Sensei: Era ahi donde debías haberle dado ese beso, no afuera.
Daniel: ¡Ahh! *suspiro* En fin. El caso es que llegamos a la estación donde ella vive y cuando sentimos el aire del exterior se acabó el encanto. De nuevo volvieron las barreras y los silencios y los comentarios sin respuesta por parte de ambos.
Lic: ¿Y el beso que tanto comentan?
Sensei: Fue cuando ella ya se iba. Dijo que tenía un regalo para Daniel pero que se le habia olvidado en la casa y que mejor otro día que salieramos se lo daría. Así que tuve la genial idea de intervenir y decirle que yo también tenia un regalo para ella. Así que le pedí que cerrara los ojos.
Daniel: Al principio no quiso
Sensei: Si, pero finalmente lo hizo y lo tomó a broma así que no dejaba de moverse. Asi que dije "ahora o nunca" y Daniel lo hizo. No fue un beso largo, nisiquiera un beso que valiera la pena dar.
Daniel: Fue tan frio y simple que incluso dolió
Lic: Ya entiendo. Y supongo que ella se enojó y se marchó corriendo, ¿no es así?
Sensei: No, sólo se sorprendió pero no comentó nada al respecto. Creo que sus palabras fueron "Bueno Dany ya tengo que irme, luego nos hablamos para ver cuando nos vemos" Y entonces se fue.
Daniel: Aún no entiendo que fue lo que salió mal.
Sensei: Fue el momento. No era el momento adecuado. Aparte estaban en la calle y eso no es nada romántico.
Lic: Romántico? Por favor! Yo no sé en que mundo viven ustedes dos. Eso de "cierra los ojos que te tengo un regalito" se me hace lo más idiota que alguien en su sano juicio podria usar para darle un beso a una chica. ¿Porque no te pones una botarga la proxima vez y le recitas un poema? Termina de hacer el ridiculo. ¿Y sabes que es peor? que en este momento ella debe estar riendose de tí, riendose de nosotros por ser tan ilusos. No cabe duda que ahi deberia haber estado yo para hacer que las cosas salieran mejor.
Daniel: ¿Y que podrias haber hecho?
Lic: Ashh, esta bien, te lo diré para que de una vez sepas como funcionan las cosas. A las chavas de ahora, es decir, a las chavas como Ale no les importa que tan tierno eres sino que tan arrojado te vuelves cuando estas con ella. Lo de robarle un beso es arrojado, pero no así señor. Hubieras aprovechado lo que me dijiste de la libreria o lo del metro para abrazarla y darselo sin más. Ahi la reacción hubiera sido otra y casi estoy seguro de que no se habría sorprendido porque ella también lo quería
Daniel: No lo sé. No se si ella también lo quería. Cuando me platicaba de aquellos amigos suyos me sentí como un tonto. Sentí que ellos tenian mas posibilidades que yo de ser su novio. Estoy tan confundido. ¿Porque es tan difícil? ¿Porque cuando la veo me desarma por completo? ¿Porque a veces es tan fria y otras veces se acerca tanto que sin palabras me pide que la abrace? No entiendo porque con ella me pasa esto.
Sensei: Eso no nos pasa cuando estamos con...
Daniel: ¿Con ella? Si, ya se a quien te refieres y tienes toda la razón. Cuando esa otra persona y yo estamos juntos las palabras, las ideas y las bromas no terminan nunca. Pero con ella es diferente porque, bueno, ella y yo somos amigos.
Lic: Además, si estan hablando de quien yo creo, ella tiene novio ¿no?
Daniel: Si. Pero aún asi la quiero tanto. Y ella sabe que la quiero, que es peor. Bueno, lo importante es que ahora no sé que hacer. Ya no se si creer en lo que ella dice o en lo que ella hace. Tal parece que soy un novato en esto
Lic: Claro que no. No lo eres y los tres sabemos que no es así. Quizás ustedes ya la olvidaron o prefieren no recordarla, pero yo fui novio de Yaz por más de cuatro años. Y nunca tuvimos un problema así. Siempre que se podía había citas con ella, besos, abrazos, palabras dulces, bromas, platicabamos en todos los lugares y cuando llegaba a casa le hablaba por telefono porque no queria dejar de escuchar su voz. ¿Recuerdan los discos que hizo el sensei para ella? ¿El playstation que le regalaste Daniel? ¿Los momentos a solas, los trabajos en la escuela, las lagrimas que derramó en tu pecho mientras la abrazabas para consolarla? ¿Que ya no lo recuerdan?
Sensei: Yo casi no la conocí, fue solo en los últimos días.
Daniel: Tú lo has dicho Lic, Yaz era tu novia. Ella se enamoró de mí, pero fuiste tú quien estuvo con ella durante esos años de escuela. Y no la recuerdo tampoco. Quise olvidar el daño que me hizo que tuve que sacrificar todo y olvidarlo todo por completo, lo bueno y lo malo. Todo de ella se me ha olvidado y el daño fue tanto que me dejó indefenso. Supongo que me lo merecía.
Sensei: Como sea. Ella se fue y ahora está Ale. Yo quiero a Ale, y ustedes también porque somos la misma persona.
Daniel: Pero ella es tan diferente. Casi no compartimos nada, más que el gusto por la lectura y cierta atracción fisica, pero eso no es una base para una relación.
Sensei: ¿Pero la quieres todavia no?
Daniel: Claro que la quiero, sino no la seguiría buscando ni la abrazaría como hoy ni pensaría en ella como lo hago ahora.
Lic: Pero no es lo mismo querer que amar. Piensa en esa otra persona con quien te llevas tan bien. Tú mismo lo dijiste, con ella las cosas son diferentes, son mejores. Eso prueba que como Ale hay muchas chavas en el mundo. Nada tiene de extraordinario y debes darte cuenta de eso o bien, seguir saliendo con ella y ponerte en el papel del Sensei hasta que un día te salga con que ya tiene novio. Eso va a doler muchísimo. No lo soportarás. Quizas yo tampoco pero eso es lo de menos. Deja de verla como una novia y busca a alguien más
Sensei: Es que es difícil separarse cuando aún sentimos algo tan fuerte por ella.
Daniel: Es cierto porque... yo aún la amo.
Lic: ¿Y porque yo, que soy una parte de ti, no te creo?
*Los tres miran hacia abajo y no hay más que decir*
Hacia mucho que no escribía un dialogo con mis otros "yo". Lo anterior está basado en hechos reales y se me ocurrió hacerlo pues a veces no hay alguien junto a mi con quien platicarlo y el Sensei y el Lic son partes muy importantes de mí que parecen como mis hermanos trillizos (y no sufro de alucinaciones ni padezco ningún tipo de enfermedad psiquiatrica ^^). Espero no haberlos aburrido y que comprendan que esta es una forma de liberar muchas veces la tristeza o la frustración que siento con lo que ocurre en mi vida.
